La vuelta al cole es un momento importante en la vida de nuestros hijos. Septiembre marca el inicio de nuevas experiencias, desafíos y oportunidades, pero también puede generar cierta ansiedad o nerviosismo en los más pequeños. Como madres y padres, es natural que queramos hacer todo lo posible para que nuestros hijos enfrenten este cambio con serenidad y confianza. Sonia Martínez Lomas, directora de los Centros Crece Bien nos ofrece 7 claves para calmar los nervios de nuestros peques para afrontar la etapa de la vuelta al cole con cierta normalidad…
Un artículo de Sonia Martínez Lomas.
¿Por qué se sienten nerviosos?
Es importante recordar que los niños, al igual que los adultos, experimentan ansiedad ante situaciones nuevas o inciertas. Volver al colegio significa enfrentarse a un nuevo curso, con nuevos profesores, compañeros e incluso nuevas materias. Estos cambios pueden generar miedo a lo desconocido, dudas sobre si podrán adaptarse o incluso preocupaciones sobre su rendimiento escolar. La buena noticia es que podemos ayudarles a gestionar esos sentimientos y convertir la vuelta al cole en una experiencia positiva.
1. Escucha activa: La clave para comprender sus emociones
El primer paso para ayudar a tus hijos a calmar sus nervios es escucharles con atención. Preguntarles directamente cómo se sienten acerca de la vuelta al cole abre un espacio de confianza donde ellos pueden expresar sus miedos o preocupaciones. Utiliza frases como:
- «Cuéntame, ¿cómo te sientes con la vuelta al cole?»
- «¿Qué es lo que más te emociona o preocupa del nuevo curso?»
Escuchar activamente significa validar sus emociones, sin minimizarlas. Decirles frases como «Es normal sentirse así antes de algo nuevo» les hace sentir comprendidos y apoyados.
2. Reforzar experiencias positivas
Recordarles momentos en los que se han adaptado a nuevos entornos o han superado situaciones difíciles con éxito es una excelente estrategia. Ayúdales a ver que este curso puede ser igual de emocionante o incluso mejor que el anterior. Puedes decirles algo como:
- «¿Recuerdas lo bien que te lo pasaste con tus amigos el año pasado? Seguro que este año harás cosas igual de divertidas.»
Este tipo de frases les ayuda a cambiar el enfoque hacia los aspectos positivos de la experiencia.
3. Apoyo constante: Acompañar en cada paso
Hazle saber a tu hijo que no está solo en este proceso y que, si algo le incomoda, puede hablar contigo en cualquier momento. Frases como:
- «Vamos a ir poco a poco, y si te sientes incómodo/a, siempre podemos hablar y encontrar soluciones juntos.»
- «Siempre puedes contarme cómo te sientes y buscaremos juntos la mejor manera de sentirnos mejor.»
Ofrecer apoyo continuo refuerza la idea de que no importa lo que pase, siempre habrá una solución y alguien dispuesto a escuchar.
4. Objetos de confort: pequeños gestos que marcan la diferencia
Para algunos niños, llevar consigo un objeto que les recuerde a casa o a algo que les guste mucho puede ayudarles a calmar los nervios. Puede ser una pulsera, un pequeño juguete o una nota especial. Explícales que pueden llevar algo que les haga sentir bien y les dé seguridad cuando se sientan inseguros.
5. La magia de la anticipación: Prepararles para el cambio
Una de las formas más efectivas de reducir la ansiedad es ayudarles a anticipar lo que está por venir. Jugar a «ir al colegio» en casa, visitar el centro escolar antes del primer día, o repasar el horario juntos puede hacer que el cambio sea menos abrupto. Además, fomentar conversaciones sobre lo que van a aprender, los amigos que volverán a ver o las actividades que les entusiasman, puede generar expectativas positivas.
6. Un mensaje de valentía y seguridad
Finalmente, uno de los gestos más poderosos que puedes ofrecer a tus hijos es reforzar su valentía. Decirles cosas como:
- «Estoy orgulloso/a de ti por ser tan valiente.»
- «Sé que puedes hacerlo, y si necesitas ayuda, aquí estaré.»
Estos mensajes no solo les dan seguridad, sino que también les recuerdan que tienen la capacidad de enfrentar lo que venga.
7. Un proceso de adaptación, juntos
La vuelta al cole es un momento lleno de emociones, tanto para los niños como para los padres. Lo más importante es recordar que, con apoyo, comprensión y amor, podemos convertir esta experiencia en algo positivo. Ayudar a nuestros hijos a gestionar sus nervios les enseña una valiosa lección sobre cómo enfrentar los cambios en la vida, y les permite crecer emocionalmente en el proceso.
Con estos sencillos gestos y frases, estarás ayudando a tu hijo no solo a calmar sus nervios, sino también a disfrutar de un nuevo comienzo lleno de oportunidades. ¡Ánimo en este inicio de curso, lo haréis genial!
Sonia Martínez Lomas.