¿Conocéis el Parque Warner en Navidad? Nosotras no habíamos estado nunca en estas fechas y el otro día decidimos que ya era hora de conocerlo, ya que a mis hijas les encanta la Warner. Tengo que decir que es una maravilla tanto la decoración, como los espectáculos y la caracterización de los personajes. En estas fechas, la Warner bien merece un hueco en vuestra agenda como plan obligatorio.
Si la entrada principal, con sus edificios inspirados en Hollywood, ya es impresionante por sí sola, sin ninguna decoración, con la iluminación navideña no os cuento. Nada más entrar -era de día- aún no estaba encendida ninguna luz, aunque paseando por la avenida principal, nos dimos cuenta que caían copos de nieve. Y es que la nieve no puede faltar en cualquier decoración navideña que se precie y como en Warner todo es posible, aunque haga sol y un día con altas temperaturas, los copos de nieve ahí están. Las niñas, alucinaron cuando los vieron. Carmen cogió un copo para ver qué era -con su habitual curiosidad- y gritó ¡mami, es como espumita! Y ¡tienes el pelo lleno!, añadió partiéndose de risa.
Bueno, acabábamos de entrar y mis hijas ya estaban ‘alucinando’. Pero cuando finalizó la avenida principal, allí estaba el comité de bienvenida al completo. Todos los personajes de la Warner, vestidos muy navideños para la ocasión, en la actuación de bienvenida al Parque, intentando convencer al famoso Scrooge de las bondades de estas fechas. Todo el espectáculo delante de un grandioso árbol iluminado, con unas bolas muy especiales con las caritas de Bugs Bunny, Piolín, Silvestre, el Pato Lucas… Claro, mis hijas, encantadas. Y Pilar, que venía deseando ver a su favorito, Bugs Bunny, sin parpadear en toda la actuación.
Después de la actuación, tocaba la zona de Cartoon Village o zona de los peques, donde se concentran casi todas las atracciones infantiles, como la mayoría sabréis. Quedamos en repartirlo de esta forma, porque íbamos con las primas mayores y la zona de ‘adultos’ o de las atracciones que te dejan sin respiración, decidimos dejarlas para la tarde.
Ni que decir tiene que mis hijas aprovecharon a tope para montar en todas las atracciones: la montaña rusa de Tom y Jerry (ahí solo montó Carmen porque Pilar es miedosilla y ésta coge bastante velocidad…), los convoys de camiones (la favorita de Pilar), el correo aéreo, las tazas de Scooby Doo, el carrusel de Cartoons, ‘He visto un lindo gatito’ (ésta le encanta a Carmen porque vas tumbada como en una plataforma que simula que ¡Silvestre corre detrás de Piolín!)… Por supuesto, pasamos a las casitas de sus personajes favoritos (la de la Abuelita y la de Bugs). También vimos algunas actuaciones navideñas más -¡todas una pasada!- y se fotografiaron con sus personajes preferidos. Además, a la entrada, junto al Teatro Chino, estaban los Reyes Magos y dentro, en la zona Old West, la casa de Papá Noel. También estuvimos en su espectáculo preferido, el de los Looney, en el auditorio (no nos lo podíamos perder), aunque para los habituales, deciros que ahora en Navidad, hay nuevos shows, como el Christmas Musical, que son espectaculares.
Por la tarde, aprovechamos que no había colas en la zona de adultos -aunque en la zona infantil no esperamos casi nada- y nos fuimos para allá para que mis sobrinas montaran en todo aquello que a mí un día me encantó y ahora con solo mirarlo desde abajo, me pone los pelos de punta, jajaja, ¿no os pasa a vosotros también?
Lo dicho, subieron en el Superman (¡dos veces seguidas!, ¡qué valor!), en Batman, en la Venganza del Enigma (la lanzadera más grande de Europa) y en los coches de choque del Joker (aquí subió también Carmen). Mientras, yo me quedé con las niñas paseando por la ciudad de Gotham y disfrutando de esos decorados que quitan la respiración y que tantas veces hemos visto en las pelis de Batman. Por allí, precisamente, andaban los superhéroes más famosos y los niños que querían, podían acercarse a hablar y hacerse fotos con ellos.
También estuvimos paseando por mi zona favorita, la de los estudios de cine ‘Movie World Studios’. Esos edificios señoriales y esas avenidas tan chulas, que te transportan a otra parte del mundo y a otra época son una pasada. Y ahora en Navidad no os hacéis una idea de lo bonito que está. Con inmensos lazos rojos en las fachadas y luces alrededor de las columnatas y de las farolas. Ideal para disfrutar de un magnífico paseo en familia. Las mayores aprovecharon también para montar en el Stunt Fall y me contaron que es la más ‘heavy’ -palabra textual- de todas las montañas del Parque Warner. Y eso que yo pensaba que nada superaba a Superman, así que los amantes del riesgo, ya sabéis, no os la podéis perder. Mientras, nosotras subimos en el Cine Tour, unos coches antiguos, al más puro estilo Hollywood, que recorren California de Norte a Sur.
Y si os mola el lejano oeste, no podéis dejar de recorrer esta zona del Parque, con su preciosa montaña rusa de madera y todo el montaje.
¡Lo dicho! Si no conocéis Warner en Navidad, no podéis perdéroslo. Es un plan obligado para estas fiestas apto para todas las edades. Más información y venta de entradas.
Sin duda una opción perfecta para pasar el tiempo en familia durante estas fiestas, si se me permite yo también voy a hacer una aportación que quizá sea buena idea para regalo de Reyes, se trata del túnel de viento de WINDOBONA, donde podrás vivir la experiencia de volar como un pájaro y es apto para toda la familia, nosotros ya lo hemos probado y tanto niños como mayores acabamos encantados.