En nuestro afán por encontrar la mejor hamburguesa de Madrid y, por supuesto, la más fresca, hemos recalado en un lugar que, aunque conocíamos de oídas, nunca habíamos estado: Hamburguesa Nostra. Se trata de una franquicia pequeña y familiar en la que el lema es “La hamburguesa de mercado”. Y ¡vaya si lo es! Desde luego la carne es de una calidad insuperable y todos los ingredientes que la acompañan son fresquísimos. ¿Por qué lo sabemos? En primer lugar, por su sabor. Y en segundo lugar, porque su cocina es totalmente acristalada y en vivo, con lo cual estás viendo las planchas con la carne y las verduras haciéndose lentamente y el montaje de tu hamburguesa.
Como os decía, hace muy poquito que cenamos en la Hamburguesa Nostra del Paseo de la Castellana, 257. La primera sensación al entrar es que está ubicado en un local chulísimo, con una amplia terraza y acristalado, decorado de manera muy urbana, con toques de carteles de neón y acabados en hormigón industrial. Una chulada. Además, se comunica con su hermano de carnes: “La Vaca Nostra”, del que os hablaremos en otra ocasión.
Nosotras elegimos como entrantes uno nachos -es obligatoria la petición de nachos allá donde vamos- y nos encantaron, calentitos y servidos con su guacamole, su nata agria y su quesito fundido, así como con el pico de gallo. ¡Una delicia para abrir boca! Luego llegó la complejísima decisión de elegir una hamburguesa entre la variedad de la carta, que recoge este manjar apto para todos los gustos y para los paladares más exigentes. Incluso cuentan con la hamburguesa sana, hecha a base de falafel de garbanzo y verduras, y que tenía una pinta extraordinaria. Nosotras, “gochas forever”, pedimos la Vacabacon, compuesta por carne de vaca, bacon, champiñones, tomate, queso cheddar, huevo a la plancha y salsa ahumada. Una auténtica delicia, aunque, ahora que nos hemos picardeado con esa maravillosa y amplísima carta, hasta que no probemos alguna más, no dormiremos tranquilas porque seguro que soñamos con su riquísimo sabor.
Las hamburguesas las puedes confeccionar a tu gusto, con el pan que elijas, el brioche tradicional, el de sésamo gourmet, sin gluten y el que lleva cereales. Además, puedes elegir el acompañamiento que prefieras, desde las patatas fritas rústicas, los brotes verdes, la ensalada de col o los bastones de batata. Una servidora optó por estos últimos y estaban deliciosos. También elegí el pan de sésamo gourmet y me pareció que tenía un sabor fino y delicioso. Junto a la hamburguesa, te ubican en la mesa, una selección de salsas de todo tipo que, como reza su cartel, es “el infierno de los indecisos”.
Además, entre su carta de hamburguesas, Hamburguesa Nostra cuenta con unas muy especiales y con un sabor sin igual: las “All Inside”, cuyas carnes están aderezadas con distintos ingredientes. Yo estuve a punto de decantarme por una que llevaba aceite de trufa blanca y que, seguro que, en la próxima visita, probaré. Además del aceite de trufa, la carne llevaba cebolla pochada y pistacho (se trata de la Cayetanoburger). Otras llevan en el interior queso curado, bacon ahumado…
No obstante, si tenéis que sacrificar los entrantes, en favor del postre, os recomendamos que lo hagáis, ya que tienen un brownie que es gloria pura. Chocolate calentito e intenso con su bola de helado de vainilla.
Degustación de cervezas
El día que fuimos a probar las hamburguesas, pudimos realizar una cata comentada de cervezas -los adultos, claro-. Fue nuestra primera vez y repetiremos experiencia porque, si ya nos encantaba la cerveza, en esta actividad hemos aprendido a entenderla y a ¡quererla más! Aprendimos la gran variedad de cervezas que existen. De hecho, todo aquel que afirma que no le gusta la cerveza es que aún no ha encontrado la suya… O no la ha buscado.
La gama de cervezas que degustamos eran de la marca Damm y fueron: la clásica Estrella Damm y también la elaboradísima y potente Voll-Damm. Ambas ya las conocíamos, pero descubrimos la Malquerida, toda una delicia de cerveza de baja graduación y con toques cítricos a naranja y también la Complot IPA, un descubrimiento mayor aún el de las IPA (Indian Pale Ale). Nos contaron que este modo diferente de hacer cerveza lo inventaron los británicos, cuando intentaban trasladar su cerveza a India y, por el cambio drástico de temperatura, la cerveza no aguantaba. De ahí que este tipo de bebida tenga una elevada graduación y gran cantidad de lúpulo. En concreto, la Complot lleva 8 lúpulos distintos y, a pesar de su alta graduación, en boca no se aprecia demasiado. Algo que nos llamó la atención fue el aroma dulce, a mango y la diferencia en boca con un sabor amargo.
Todo un descubrimiento, tanto las hamburguesas de Hamburguesa Nostra, como nuestro nuevo idilio con la cerveza.