Hace no demasiado empecé a fijarme en un estilo muy característico de zapatillas con aspecto de ser increíblemente cómodas y no pude evitar buscar como podía la etiqueta. Discretamente, porque una no va por ahí preguntando a desconocidos qué llevan puesto en los pies, iba mirando y mirando con insistencia hasta que, finalmente, di con la marca: Natural World Eco. ¡Ya no se me olvida! Entré en su web y descubrí todo un nuevo concepto de calzado que, lo reconozco, me ha conquistado. Aviso, este post no es pagado. Repito: NO es publicidad.
Digo que parecían cómodas porque eran principalmente turistas quienes las llevaban y todos sabemos que cuando alguien va a hacer turismo, el calzado es siempre el más cómodo que tenemos en el zapatero, lo más gastado, la apuesta segura… en este caso no eran zapatos viejos lo que llevaban sino zapatos con los que los pies parecían sentirse a sus anchas y de colores súper interesantes. Los hemos probado y damos fe: la comodidad es su bandera.
Cuando pude entrar en su web vi que no sólo aseguraban comodidad, sino que además se trata de calzado muy interesante porque es respetuoso con el medioambiente:
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Están hechos artesanalmente en España.
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Son naturales y veganos.
Porque sí, los zapatos veganos existen. Fue la primera noticia que tuve de ello: el verlo en letras grandes en su web. ¡Y me encantó! Aunque por otro lado, si vegano significa que están hechos con materiales libres de sufrimiento y origen animal, ya es hora de que se popularice este tipo de calzado, ¿verdad? Parece mentira que no haya más marcas que promocionen esto, lo cual da que pensar. Ahora que no nos interesa llevar zapatos de piel, o al menos no siempre… ¡este calzado nos interesa y mucho!
Otra gran noticia es que fabrican calzado para hombre, mujer, niño y niña así que este verano podéis disfrutar todos de nuevos zapatos que no solo son cómodos sino que son muy, muy chulos. Personalmente me han conquistado los que llevan la puntera reforzada que para los niños es maravillosa y para los mayores da un estilo desenfadado muy divertido. Hacía años que no la llevaba y cuando miro al suelo y me veo los pies, me siento rejuvenecida.
Si no es vuestro estilo, tened presente que podéis optar por modelos más «casual», tanto en zapato como en zapatillas y sandalias, pero también más de vestir así que solo os queda investigar su web y decidir cuál es el vuestro.
Os recomendamos encarecidamente hacerlo ahora porque tienen descuentos del 15% en productos seleccionados y seguro que vuestra cesta de la compra os resulta mucho más atractiva.
En mi caso, después de comprar los primeros, probarlos, confirmar que no me hacían daño, que los acabados eran lo esperado y que, en definitiva, no me defraudaban, me lancé a una compra familiar y estamos todos encantados, sobre todo los niños. Son las únicas zapatillas un poco más «formales» que he logrado que se calcen este verano los peques porque con todos los demás, o se ven «deditos» o no quieren saber nada de calzarse.
Pero no todo iba a ser maravilloso, os cuento también un «pero»: De los cinco pares, solo uno de los que compré no nos ha conquistado del todo porque el remate de la tira que embellece el zapato en la parte superior se encuentra justo en la zona del talón y a la peque se le clavaba un poco. Con unos pinkies de toda la vida… ¡solucionado!
Si sois de los que preferís probar en tienda y comprar presencialmente, en lugar de hacerlo online, no hay problema porque hay muchísimas zapaterías en las que se vende esta marca. Ahora que la conocéis, fijaos en la etiqueta porque os va a pasar lo mismo que a mí: ¡no vais a dejar de verla!