El Parque Warner cumple 15 años y he de confesaros que esta ha sido mi primera oportunidad para visitarlo. A pesar de haber vivido estos últimos años muy cerquita de Madrid nunca me había animado a acercarme. Ha tenido que ser una ocasión especial para que por fin pase un día genial entre atracciones y espectáculos. Y desde luego, no pudimos tener mejor puntería porque el Parque ha estrenado la temporada con un día muy soleado que hasta permitió que los más intrépidos probasen las atracciones de agua. Nosotras finalmente nos quedamos con las ganas, porque a pesar de que la temperatura en el sol era más típica de verano que de primavera, en la sombra aún hacía fresquito y no queríamos arriesgarnos a coger un resfriado.

Lo que sí hicimos fue visitar los espectáculos, tanto los tradicionales como algunas de las novedades para daros buena cuenta de ellos y he de decir que esta temporada promete mucho. Por la mañana los Looney Tunes celebraron un Festival de Baile “super competitivo” que no nos podíamos perder. Los personajes hicieron que todos los niños se pusieran a bailar sin importarles las “rivalidades” pudieran tener encima del escenario. Las canciones tan actuales hicieron que pequeños y mayores no pudiésemos aguantar el ritmo y las ganas de mover el esqueleto. Así que para relajar un poco el cuerpo, después de esta fiesta del baile nos dirigimos a disfrutar de algunas atracciones tranquilitas como los coches de choque o las sillas voladoras, en las que por cierto nos quedamos boquiabiertas viendo cómo los más pequeños se montaban una y otra vez mientras que nosotras salíamos un poco perjudicadas después de la primera vuelta.

Cuando íbamos paseando por lo que parecía el lejano oeste nos encontramos un espectáculo de Can Can callejero que nos entretuvo durante un rato. Es lo mágico que tiene ir paseando por el Parque, en cada rincón te encuentras algo especial: puedes ver a Batman y el Joker bajando de un tejado y haciendo cabriolas con sus motos, a Superman paseando por las instalaciones y saludando a todo el que se acerca, al gallo Claudio haciéndose fotos con los niños…  Un sinfín de cosas que no deja de sorprenderte.

Y seguro que a estas alturas del día creeréis que tuvimos suficiente baile por la mañana y no nos quedaban ganas para más música, ¡pero qué va! Nos acercamos a uno de los nuevos espectáculos de la temporada: Rock of Ages. Esta gran apuesta que une el rock and roll y con una historia de amor no defraudó a los más pequeños que bailaron de nuevo al son de la música, aunque a veces no entendiesen algunos detalles del argumento que estaba teniendo lugar sobre el escenario.

Pero indiscutiblemente, el espectáculo que más triunfó en el día fue el clásico Loca Academia de Policía. La cosa prometía desde el principio, pues para entrar al teatro había una cola que creíamos que iba a hacer que nos quedásemos fuera, pero aun así aguantamos ¡no nos podíamos quedar sin verlo! Y menos mal, porque no nos arrepentimos para nada. Nos quedamos como niñas atentas a un espectáculo lleno de especialistas que no paraban de hacer cabriolas espectaculares con sus coches y motos en un espacio relativamente pequeño. La precisión que necesitaban era máxima, con lo que estuvimos en vilo durante todo el espectáculo junto a todo el público familiar que nos acompañaba.

Una experiencia que recordaremos durante mucho tiempo, que seguro que repetiremos muy pronto y que sin lugar a dudas recomendamos a tope.