Encerrada en una cárcel y condenada a cadena perpetua y, de repente, encuentras un magistral plan de fuga en clave que debes ir descifrando poco a poco… ¿Una peli? ¡De eso nada! Esto que os cuento fue nuestro plan del viernes en Fox in a Box Madrid. Lo pasamos en grande realizando el juego de escape de Cadena Perpetua en familia y en su versión de combate.
¿Qué quiere decir esta modalidad “combate” de Escape Room que ofrecen en Fox in a Box? Muy fácil. Quiere decir que, si sois un grupo numeroso, podéis competir realizando dos equipos, al mismo tiempo, en dos salas diferentes y superando el mismo juego con las mismas pruebas para ver quién logra escapar el primero. ¡No me digáis que no es genial! Allí que nos fuimos las mamis con nuestros retoños, de múltiples edades, desde los 8 a los 17 años ¡y todos lo pasamos genial! Disfrutamos y nos metimos de lleno en las pruebas.
Cuando llegamos a Fox in a Box, en concreto al local ubicado en la calle Áncora de Madrid, ya que la empresa también cuenta con otro local en la calle Infantas, descubrimos un lugar chulísimo. Nos indicaron que esperásemos en una zona donde nos irían a buscar y nos darían indicaciones. Una zona que ya estaba decorada, como si estuviésemos en la antesala de la prisión. Mientras esperamos, hicimos los equipos que, os recomendamos que sean lo más equilibrados posibles en cuanto a número de personas. Las tres mamis, junto con los dos niños más pequeños constituimos el primero equipo y el resto de niños, más mayores, el otro.
Cuando accedimos, nos dieron varias indicaciones para realizar el juego y contextualizar la historia. Como si de una auténtica prisión de alta seguridad se tratase, nos requisaron las pertenencias en un cubeto, que introdujeron en un armario y nos situaron en línea para realizarnos las fotografías de frente y de perfil destinadas a nuestra ficha policial. Nos aclararon que había un botón que solo se pulsaba en caso de emergencias y nos introdujeron en nuestros módulos.
Una vez dentro, el equipo de las mamis nos distribuimos en dos celdas que se cerraron y allí comenzó el trepidante juego en el que tendríamos que escapar de la celda en 75 minutos, máximo. Comenzamos a buscar pistas y todo fue una sucesión de emociones, pruebas de destreza, habilidad, cálculo… Códigos, cajas escondidas, candados, claves encriptadas e incluso pasadizos en los lugares más insospechados de unas celdas, aparentemente pequeñas. Y digo aparentemente porque en Fox in a Box, las cosas nunca son lo que parecen inicialmente. Una recomendación, mamis: si utilizáis gafas de cerca, llevadlas con vosotras y no las dejéis en el armario con vuestras pertenencias, ya que, a alguna de las mamás, nos costó visualizar los códigos.
Tengo que resaltar que, la mayoría de los juegos de escape de Fox in a Box, son aptos para hacer en familia y, si no lo son, al reservar y decir que vais con peques, los adaptan y que también cuentan con juegos específicos para que realicen los niños. Me parece una chulada, poder hacer un juego de estas características en un gran grupo y con niños de tan amplio espectro de edades. Os puedo decir que, dentro de mi equipo, estaba mi pequeña Pilar, de 8 añitos y otro niño de 12, además de las mamás, y que los niños disfrutaron de lo lindo encontrando las pistas, manipulando objetos, completando los acertijos e interpretando planos.
Lo más extraordinario de los juegos de Fox in a Box es esto, que lo disfrutamos todos y nos resulta un desafío a mayores y a pequeños. Tanto es así que las capacidades que no aportan los adultos, las aportan los niños. De hecho, menos mal que las mamás íbamos con dos de los peques porque, gracias a ellos, pudimos resolver varios enigmas.
Es increíble la capacidad de observación que pueden tener los niños, en comparación con la de los adultos. No os quiero destripar ninguna de las pruebas, pero, por poner un ejemplo, en un armario, vimos tres franjas de colores y fue uno de los peques que iban con nosotras el que gritó: “¡Espera! ¡Estas líneas las he visto en otra parte!” Y de hecho, así era. Gracias a él pudimos obtener unos códigos numéricos cruciales para resolver el juego. De ahí que en Cadena Perpetua cada punto de vista cuente y el trabajo en equipo sea algo fundamental. Esos son los valores que más nos gustan que nuestros niños aprendan a través del juego.Y os preguntaréis: ¿quién salió antes de las salas? ¿Las madres o los hijos? Pues… ¡nos ganaron los hijos! Por poquito tiempo, eso sí, ya que salieron poco más de un minuto antes que nosotras. Pero después, comentando el juego con ellos, nos dijeron que les habían tenido que ayudar por el interfono porque se atascaron en dos pruebas. Y a nosotras nos ayudaron por el interfono ¡alrededor de catorce veces! ¡Jajajajajajaja!
Desde luego, si queréis pasar un rato genial y diferente en familia y poner a prueba vuestras habilidades más detectivescas, no os lo penséis: probad alguno de los juegos de Fox in a Box. Echad un vistazo a los disponibles en su web y también a los Street Scapes que tienen por Madrid y que os harán descubrir la ciudad de una forma diferente a la que estáis acostumbrados.
¡Ah! Y después de las emociones fuertes del Escape Room, decidimos tomarnos algo en el bar de Fox in a Box: Spoiler Bar. Un lugar precioso y decorado con mimo y esmero, en el que podréis tomaros algo fresquito y probar la mejor cerveza artesana, además de merendar o cenar algo: tenéis burrata, totopos, tacos, croquetas, steak tartar, bocata, ensalada o los más deliciosos dulces. Consultad las opciones disponibles porque ofrecen celebraciones de cumple o despedidas de solteros: ¿os imagináis una celebración con los vuestros realizando un alucinante juego de escape y después tomaros algo en este local tan chulo de Madrid? Toda la información en www.spoilerbarmadrid.com.
Una experiencia muy divertida, mi familia y yo participamos en uno y lo pasamos genial.