Cuando planificamos nuestras vacaciones con un bebé, es esencial asegurarnos de que llevamos todos los artículos necesarios para su comodidad y seguridad. Entre los muchos elementos esenciales, uno que no podemos pasar por alto es el protector de cuna, entendiendo por protector de cuna tanto el clásico que se ata a los barrotes de la cuna y la deja perfectamente acolchada (la clásica chichonera ) como los protectores móviles, todos ellos a la venta en tiendas especializadas como Mimuselina. ¿Sabes cuáles son y por qué son fundamentales en vuestras vacaciones?
Sobre protectores móviles podríamos hablar largo rato, pero os lo resumimos por si no los tenéis localizados:
- Los cojines anti-vuelcos: se colocan a uno y otro lado del bebé para mantenerle en una postura segura.
- Los protectores de barrera: ideales si usamos cunas de barrotes y el peque ya comienza a levantarse puesto que suelen morder las barras (¡y lo que pillan!)
- El cojín serpiente que se puede colocar dentro de la cuna adaptándose a la forma de bebé.
- El «cuconest» que es una especie de minicuna que «limita» el espacio del bebé tanto en la cuna como en la cama de los padres si optáis por el colecho.
Cada familia decidirá cuál es la opción que mejor se adapta a sus necesidades, pero todas ellas tienen algo en común: buscan un sueño seguro y tranquilo para vuestro peque. Os contamos porqué este artículo no puede faltar en vuestras vacaciones.
¿Por qué llevar un protector de cuna de vacaciones?
- Protección y seguridad para el sueño: Cuando estamos de vacaciones, es fundamental garantizar que el bebé duerma en un entorno seguro y cómodo. El protector de cuna juega un papel vital en esto. Si os decidís por contar con uno para tu peque, aseguraos de que el que compráis está diseñado con materiales de alta calidad y suaves al tacto, que protegen al bebé de golpes o lesiones durante el sueño. Con una barrera suave y acolchada alrededor de la cuna, o en vuestra propia cama si optáis por el colecho, el bebé podrá moverse libremente sin riesgo de hacerse daño y en una zona limitada que os ayudará también a identificar cuál es su espacio incluso durante el sueño.
- Ambiente familiar y acogedor: Prácticamente todos los papás notan que, cuando cambia el ambiente, el peque está más alterado, más nervioso y hasta puede que le cueste conciliar el sueño. Notaréis una gran diferencia si, a la hora de dormirle, recreáis un ambiente familiar para el bebé. Los protectores de cuna ayudan a que cualquier cuna se parezca a la de casa tanto por el olor como por los colores que verá más cerca, brindando una sensación de familiaridad y comodidad al bebé, sin importar dónde esté. Además, se adaptan perfectamente a cualquier tipo de cuna así que son comodísimos.
- Versatilidad y practicidad: Los protectores de cuna se llevan fácilmente en el equipaje y evitan que tengáis que llevar la cuna de viaje, siempre que el alojamiento al que vais cuente con un servicio de alquiler. Además de transportarse fácilmente, también son fáciles de instalar y ajustar, y se adaptan a diferentes tamaños de cuna.
- Calidad y durabilidad: Cuando se trata de artículos para bebés, la calidad y la durabilidad son fundamentales. Conviene que estén fabricados con materiales fáciles de lavar y mantener limpios, lo cual es esencial durante los viajes donde la higiene puede ser un desafío.
Sin duda son muchos los «trastos» que se llevan en las primeras vacaciones con un bebé, pero todo lo que tenga que ver con el sueño es primordial porque estando bien descansados todos disfrutaremos de las vacaciones. Y si, como en este caso, además favorecen la seguridad del peque, entonces seguro que os viene de maravilla.