El día 5 de junio se celebra el día mundial del medio ambiente y en Mamá tiene un Plan queremos recomendaros unas cuantas rutas por la naturaleza para que todos aquellos que queráis disfrutéis del campo y el aire libre y dejéis de lado el coche y la ciudad.
Como todos sabemos para poder respirar un aire bien puro tenemos que salir de entre los edificios, de esta gran tela de araña que es Madrid y para ello lo que nosotros proponemos es una escapadita a la sierra de Madrid, aunque no tiene porqué ser siempre a la sierra, en otros post conoceremos otras estancias donde pasar un buen rato al aire libre sin contaminación y disfrutando del paisaje madrileño.
Comenzamos nuestra andadura acercándonos a lo que todo madrileño conoce como la Sierra de Guadarrama, más concretamente a la parte que pertenece al Valle de la Fuenfría, del que hablaremos con asiduidad. En esta primera ruta conocida con el nombre de Camino Schmidt, detallamos que se trata de una ruta familiar, la podrán realizar todos los integrantes de la familia mayores de 8 años, ya que el recorrido total es de 14 km.
Es una ruta que se puede realizar en cualquier época del año, es tan agradable en invierno como en verano, aunque eso sí, en verano puede que pasemos más calor, el sendero está homologado, es decir, la ruta o senda está construida para este tipo de actividades, la dificultad del recorrido es baja, no es muy complicado pasear por este precioso paraje mientras disfrutas de tu familia.
En cuanto al tiempo de duración debemos decir que es bastante amplio, de media los viandantes calculan que la ruta entera precisa de 4 horas hasta el final, pero puede hacerse en un baremo de entre 3 y 6 horas. Lo bueno que tiene esta ruta es que posee toda la señalización pertinente para seguir la senda, es complicado perderse.
Seguimos con nuestro post e incluimos ahora una ruta en otro de los lugares emblemáticos de la sierra madrileña, hablamos de un lugar ocupado desde la Edad del Bronce, cuna de romanos y espacio de leyendas e historias controvertidas, hablamos claro está de La Pedriza, situado en la vertiente sur de la sierra de Guadarrama ha servido de cobijo a muchas civilizaciones y ahora es digna de recoger algunas de las rutas más interesantes de la comunidad madrileña.
El nombre de la ruta es bien conocido por su leyenda, Circular al Cancho de los Muertos. Una ruta de 6 km y de dificultad relativamente baja, para un público familiar, para poder disfrutarla desde los 6 años en adelante. Lo malo de esta ruta es que no tiene la señalización que debería tener, pero aún así es una ruta relativamente sencilla, con un desnivel máximo que no llega a los 400 metros y que se puede disfrutar en cualquier época del año.
Esta ruta se puede completar en un total de 2 horas, es decir que no dará tiempo a que el cansancio haga mella en nuestros cuerpos. Lo único que puede crear algo de controversia es el estado del firme, ya que pasaremos por varios tramos en los que no tenemos una senda desgastada y modificada para andar normal por lo que es aconsejable llevar un buen calzado, una buena preparación física antes del comienzo (calentar tobillos, rodillas…) y por si acaso, no estaría de más llevar preparado un buen kit de primeros auxilios. No es que vayamos a una ruta complicada, pero humano precavido vale por dos.
Continuamos nuestros paseos por la sierra de Guadarrama y sin salir de La Pedriza llegamos a una ruta conocida por el nombre de su punto de partida y su meta, esta ruta se llama De Canto Cochino al Collado de la Dehesilla, es la ruta más complicada que vamos a incluir en nuestra relación y es que se trata de una ruta en la que en todo momento estaremos en subida, pero no os asustéis, no vamos a escalar, solo se trata de un paseo, una ruta por la montaña.
En esta ruta tenemos un recorrido de 8 km, con una duración media de 3 horas, aunque se puede acortar y llegar en una o dos incluso. El desnivel que vamos a encontrar es parecido a la anterior, unos 450 metros de desnivel que pueden hacer que lleguemos cansados al final. Es una ruta que tiene un firme un tanto irregular, con caminos más estrechos que pueden hacer más complicado el recorrido, aún así no es imposible ya que una familia puede recorrerla sin problemas con niños a partir de 8 años.
Y aquí concluye nuestro primer desglose de rutas familiares por la sierra de Madrid, rutas en plena naturaleza donde el aire limpio y libre que no tenemos en la capital es el mayor protagonista, el campo y el olor a hierba fresca los apuntadores y nuestro ímpetu de aventura el telón de la función que hasta que no se levanta no podremos disfrutar.