Mi mujer y yo llevábamos un tiempo escuchando a varios amigos con hijos recomendarnos viajar a Berlín. “Es una ciudad muy amable con los pequeños”, nos decían con palabras más o menos parecidas. Sin embargo, no es lo mismo viajar en primavera o verano que en el puente de diciembre, que es cuando nosotros teníamos los días para escaparnos. Después de hablar con VisitBerlín (¡gracias, Joyce y Alexandra!) nos convencimos de que sería una experiencia única conocer la capital de Alemania unas semanas antes de las navidades. ¡Y así fue! Unos abrigos por allí, unas bufandas por allá, guantes, camisetas térmicas y muchas ganas de visitar mercados navideños, museos y lo más importante, pasear por las calles de Berlín. ¡Inolvidable!