Hace no demasiado empecé a fijarme en un estilo muy característico de zapatillas con aspecto de ser increíblemente cómodas y no pude evitar buscar como podía la etiqueta. Discretamente, porque una no va por ahí preguntando a desconocidos qué llevan puesto en los pies, iba mirando y mirando con insistencia hasta que, finalmente, di con la marca: Natural World Eco. ¡Ya no se me olvida! Entré en su web y descubrí todo un nuevo concepto de calzado que, lo reconozco, me ha conquistado. Aviso, este post no es pagado. Repito: NO es publicidad.