Restaurantes para ir con niños
Los mejores restaurantes y cafeterías para salir a comer con niños. Lugares con los servicios básicos para niños (tronas, cambiadores o menú infantil) o incluso con actividades, talleres y amplias zonas de juego para que la sobremesa sea un espacio relajado para los adultos mientras los niños lo pasan en grande.
Domingos para ti y tus peques en PimPam
Un espacio para que los niños se diviertan mientras los padres disfrutáis de la sobremesa
Panorama Oyster Bar, en Majadahonda, una propuesta de restauración que combina platos clásicos con otros más viajeros
La decoración del interior del local es una delicia y su amplia y preciosa terraza se convierte en la opción perfecta para disfrutar el verano.
El Perenquén, un trocito de Canarias en el centro de Madrid
La gastronomía canaria más tradicional convive con la de fusión.
Llega a la Gran Vía madrileña Mercado de la Reina 10
El nuevo restaurante con cocina de Mercado, al lado de su hermano Mercado de la Reina, ubicado en el número 12
El Brunch de El Café de la Ópera
Una opción completísima, con dulces y salados, fríos y calientes, justo al lado del Teatro Real de Madrid
El Brunch de la terraza Bocanegra
Un planazo ideal es disfrutar de esta completa experiencia gastro, en un entorno idílico en el centro de Madrid
Shangrila Dimsum Bar es el restaurante especializado en estas deliciosas empanadillas y en comida tradicional
Está ubicado en la céntrica calle Leganitos, justo al lado de la Plaza de España, con unos precios muy asequibles y cocina deliciosa.
Llega a Madrid MOYO, el primer yogur helado con auténtica receta búlgara, ricos y cero por ciento de grasa
Además, podrás añadir toppings ilimitados, desde fruta, galletas, pasando por culis o gominolas, ¡deliciosos!
Fratelli Figurato inaugura su tercer restaurante con el que trae el sabor de Nápoles a Madrid
En él, en comensal disfrutará del street food napoletano (I Fritti), de sus premiadas pizzas y de las mejores birras artesanas italianas.
El hotel balneario Castilla Termal Olmedo es un remanso de tranquilidad construido sobre un convento del siglo XII
Cuenta con amplias habitaciones familiares y los niños pueden acceder a las piscinas, con aguas mineromierales del antiguo manantial.
